El ascenso económico de México para 2022

Se espera el ascenso económico de México para 2022 con un 3.6% el cual vendrá expandiéndose desde el 2021 con un 5.3% (por debajo de lo proyectado anteriormente con un 4.6%). México es la economía más grande de Latinoamérica luego de Brasil y se estima que su crecimiento económico esté recuperado por completo para el año que viene a niveles prepandémicos.

En los últimos treinta años, México ha logrado avances considerables en términos de su estabilidad política y macroeconómica, así como en su internacionalización. Esto ha ayudado al país a dejar atrás sus recurrentes crisis internas y manejar con éxito la tormenta global que estalló en 2008-2009. En particular, luego de una caída del PIB de 4.7% en 2009, la economía mexicana creció a un promedio anual de 4.3% entre 2010 y 2012.

Y aunque toda la evidencia apunta a una cifra de crecimiento del PIB significativamente menor en 2013 (del orden de 1.3 %) debido a la debilidad de las condiciones globales y el retraso en la adopción de estímulos fiscales, es probable que en los próximos trimestres se produzca una reaceleración paulatina, apoyada en la mejora de la demanda del exterior (es decir, EE.UU.) y las políticas monetarias y fiscales.

El ascenso económico de México

Un poco de historia económica de México

La Crisis de la Deuda de 1982 y la Crisis del Tequila de 1994-1995 han servido como incentivo para promover cambios económicos, políticos y sociales de gran alcance en el país durante las últimas tres décadas.

Tales cambios fueron cruciales para reducir las vulnerabilidades externas e internas que sufrió la segunda economía más fuerte de América Latina en la década de los ochenta.

Por otro lado, el Pacto Social alcanzado por empresarios, sindicatos y el gobierno en 1987. En virtud del cual se acordó fijar precios, entre otros acuerdos. Fue fundamental para romper la espiral inflacionaria en la que se había hundido México.

Posteriormente, el proceso de desregulación, la eliminación de los subsidios que favorecen a las empresas nacionales. Asimismo, la apertura de la economía y una autoridad monetaria independiente y transparente. Cuya prioridad de esta era el control de la inflación también han contribuido a moderar los precios. Por último, la mejora de la regulación y supervisión bancaria y la adopción de un tipo de cambio flexible después de la Crisis del Tequila son dos pilares adicionales que han apuntalado la estabilidad macroeconómica del país.

Las autoridades monetarias transparentes cuya prioridad era controlar la inflación también han contribuido a moderar los precios. Por último, la mejora de la regulación y supervisión bancaria y la adopción de un tipo de cambio flexible después de la Crisis del Tequila son dos pilares adicionales que han apuntalado la estabilidad macroeconómica del país.

La autoridad monetaria transparente cuya prioridad era controlar la inflación también ha contribuido a moderar los precios. Por último, la mejora de la regulación y supervisión bancaria y la adopción de un tipo de cambio flexible después de la Crisis del Tequila son dos pilares adicionales que han apuntalado la estabilidad macroeconómica del país.

Estructura económica del país

Si bien todos los cambios antes mencionados han influido en la configuración del México de hoy. Sin embargo, uno de los elementos que más transformó la estructura económica del país fue su decisión de abrir su comercio.

Además de estas ventajas arancelarias y de inversión promovidas por los gobiernos de México y Estados Unidos, otros tres factores también se encuentran detrás del “boom maquilador”. La posibilidad de fragmentar los procesos productivos entre diferentes países (deslocalización), costos laborales relativamente bajos y la cercanía geográfica de una gran economía. De hecho, la más grande del mundo con altos costos laborales.

En consecuencia, las exportaciones mexicanas pasaron de representar el 11% del PIB en 1980 al 33% en 2012. Algo que ayuda en el ascenso económico de México. Más de la mitad de todas las exportaciones provienen de estas plantas y cerca del 80% es absorbido por Estados Unidos, principal destino de las exportaciones del país.

Sin duda, este cambio de una economía dependiente de los componentes del crecimiento interno a una economía dependiente de las exportaciones explica varias historias de éxito rotundo.

El caso más destacado y reciente sería el de China. Después de comenzar a abrir su economía en la década de los noventa, logró mantener tasas de crecimiento promedio del 10% anual.

Pero también destacan otros países. Como lo son los cuatro tigres asiáticos. Entre ellos Corea del Sur, Taiwán, Hong Kong y Singapur en las décadas de 1970 y 1980. O anteriormente los casos de Alemania y Japón. En las décadas de 1950 y 1960 respectivamente.

Sin embargo, ya pesar de los logros de México, sus tasas de crecimiento económico han estado claramente por debajo de las alcanzadas por estos otros países en sus años de bonanza.

Problemas estructurales

El hecho es que la fuerte dependencia del país de las maquiladoras (y, por extensión, en algunos tipos de deslocalización) implica ciertos inconvenientes. Entre ellos especialización en industrias manufactureras relativamente volátiles. Asimismo la alta sensibilidad al ciclo económico del país de destino (EE. UU. en este caso) y fuerte competencia de otros países dada la facilidad de transferencia de este tipo de procesos productivos.

De hecho, la rivalidad internacional ha planteado un serio desafío. El hecho de que México comenzara a abrir su economía precisamente al mismo tiempo que China, una potencia demográficamente devastadora con salarios altamente competitivos, puede explicar en parte el retraso en el ascenso económico del país azteca.

Pero la falta de acción del propio México para remediar problemas estructurales importantes, tiene mucho que ver con este retraso. Asimismo en particular la baja calidad de la educación, las ineficiencias en el mercado laboral y la competencia insuficiente en sectores estratégicos.

Una mejora en estas áreas podría haber minimizado los inconvenientes de sus maquiladoras. Al estimular nuevas industrias manufactureras con mayor valor agregado podía habertse logrado. Por lo que son menos volátiles y sensibles al ciclo de otros países, además de ser más competitivas a nivel internacional.

Sin embargo, las perspectivas a medio plazo son alentadoras gracias a la convergencia de varios elementos. Por un lado, el Pacto por México. El cual fue suscrito por los tres partidos políticos más importantes de México a fines de 2012. Este ha generado el deseado consenso político que es fundamental para llevar a cabo un ambicioso plan de reformas que podría brindar un valioso impulso al potencial de crecimiento y el ascenso económico de México para 2022.